domingo, 7 de septiembre de 2014

Y pasó lo IMpensable...

A veces pasa.

Pasa que te haces una estructura de pensamiento. Que se asienta sobre unos pilares que se han ido forjando a lo largo de tus vivencias, de tus valores, de tus conocimientos... Y entonces pasa. Así, de repente lo IMpensable para tí. Y así de repente te descubre pensando "me gustaría ser tío para poder tener la relación que tienen éstos chicos".

Y entonces ya empiezan a temblar los pilares. "¿¿Cómo??" " ¡Si se supone que entre la tías se establecen unos códigos que la norma de género masculina imperante JAMÁS permitiría que se diera entre tíos!" "¡Si los tíos han aprendido a hablar entre ellos con una fachada de "machote" que impide que se abran a otros hombres emocionalmente!"  "¡Si los tíos no hablan de su sexualidad sin tapujos y hablando de sus miedos!" Y bla, bla, bla, bla... (mi cabeza esque habla mucho)

Y entonces, a veces, pasa.

Y claro...Es como una 'ostia' mental.
Porque encima éstos chicos no venían con su rollito aprendido de "sí, soy un hombre que he hecho talleres de deconstrucción de la masculinidad más macha y soy super-feminista como tú" (que ya sabemos que mucho lerele...").

Éstos chicos venían tal cual. Con su nomadaneta, su rollito "brikindans" y su coquetismo. Y una que es muy suya piensa "uff que pereza un grupo de tíos tan tíos y encima del norte..."

Y aquí me hayo. Con el síndrome del nido vacío (yo que soy -o era- tan celosilla con mi espacio). Y reconociendo que me he pegado unos días estupendos rodeada de tíos muy "tíos" y que hasta los he envidiado.

Me ha encantado ver como hablaban de sus emociones, como se escuchaban entre ellos y se apoyaban. Como se cachondeaban de sus más y de sus menos. Como se conectaban con los flows de sus cuerpos (sigo anonadada). Como expresaban sus miedos en las relaciones y en sus sexualidades. Como se dejaban sentir y experimentar desde el respeto a sí mismos y a las personas de sus vidas. Como seguían siendo ellos mismos aún rodeados de una feminista muy feminista...*

Así que gracias universo por el tembleque mental y el crecimiento que conlleva. Gracias a la NO casualidad de encontrarte después de tantos años Kampeone y gracias a vosotros, equipo EFE.
 Dedicado...


* Sí, existen hombres diferentes.Así que rodeámonos de hombres que nos hagan sentir bien, que nos hagan reir, que  hablen de sus miedos, que lloren, que bailen sin tapujos, que nos quieran libremente felices y que nos hagan vibrar...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Barreras, fachadas, actitudes aprendidas y con sus raíces bien profundas, respuestas automáticas... muchas veces todo eso responde a miedos y cosas de las que uno ha aprendido a avergonzarse. Pero... avergonzarse de que? donde está el.motivo de la vergüenza? acaso existe la vergüenza? sólo en un entorno abierto y evolucionado mentalmente, las personas se atreven a cambiar y a deshacerse de toda la.mierda que llevamos en nuestras cabezas. Es muy importante darse cuenta de que no hay nada de que preocuparse. Sólo fluir como el agua es el objetivo.

Anónimo dijo...

Demasiada cultura patriarcal, demasiado síndrome de “Gorilismo” (Machos sin sentimientos) Somo humanos, independientemente del genero o del sexo, somos unos seres que necesitan ser cuidados, mimados y tratados con sinceridad y respeto.

Y cuando encuentras unas conexiones tan especiales, las palabras hablan desde el corazón, la mente no piensa, si no que ordena lo que sentimos, ¿y que sentimos? Sentimos tantas cosas... cada día...y si ya ademas están relacionadas con las personas que nos rodean y forman parte de nuestras vidas...

Que maravilloso es compartir y compartir así, sin tapujos, con sinceridad, con cariño,

Con mucho coñocimiento y con mucha ivaginacion.

El Equipo EFE regresara algún día al hogar del “triangulo mágico” ... Lo sabemos ;)

Gracias dúo.